Cricetinae. Especies[editar] El hámster dorado o sirio puede medir cerca de 15 cm, es originario de Siria.
Su pelaje más habitual es de un tono marrón claro, aunque a veces son de pelaje amarillo claro, pero en las tiendas de animales puede recibir nombres muy diversos según su coloración. Existen algunas variedades de la especie con distintos rasgos, como un pelo más largo, que puede llegar a varios cm y suele requerir cuidados especiales. Los hámsteres dorados son muy territoriales, y suelen pelearse hasta la muerte si se mantienen en una misma jaula con otros miembros de su especie. Cuatro especies del género Phodopus (hámsteres enanos): Hámster ruso enano. Características[editar] Comparativa de tamaños de las principales especies de hámster usadas como mascotas. Abazones (bolsas de las mejillas) Descubrimiento del hámster sirio[editar] En 1839 el zoólogo británico George Robert Waterhouse halló un hámster de mayor edad en Siria, llamándolo Cricetus auratus, el hámster dorado. Felis silvestris catus.
El nombre actual en muchas lenguas proviene del latín vulgar catus.
Paradójicamente, catus aludía a los gatos salvajes, mientras que los gatos domésticos, en latín, eran llamados felis. Como resultado de mutaciones genéticas, cruzamiento y selección artificial, hay numerosas razas. Algunas, como la raza Sphynx o la Peterbald están desprovistas de pelo; otras carecen de cola, como los gatos de la raza Manx, y algunas tienen coloraciones atípicas, como los llamados gatos azules. El gato se comunica a través de vocalizaciones. Las más populares son su característico maullido y el ronroneo, pero puede aullar, gemir, gruñir y bufar.[11] Además, adopta poses o expresiones que informan, a sus congéneres, sus enemigos o sus cuidadores, de su ánimo o sus intenciones. Junto con el perro, es el animal doméstico más popular, como mascota, como ayuda en la lucha contra roedores o ambas cosas. Nomenclatura[editar] Existen varias formas para denominar a un grupo de animales. Características[editar] El. Ornithorhynchus anatinus.
La inusual apariencia de este mamífero —ponedor de huevos, venenoso, con hocico en forma de pico de pato, cola de castor y patas de nutria— desconcertó a los naturalistas europeos cuando se lo encontraron por primera vez, llegando incluso a ser considerado por algunos como una elaborada falsificación.[4] Es uno de los pocos mamíferos venenosos existentes; los machos tienen un espolón en las patas posteriores que libera un veneno capaz de producir un dolor intenso a los humanos.
Sus características únicas lo convierten en un importante sujeto de estudio en el campo de la biología evolutiva, así como en un símbolo reconocible e icónico de Australia; ha aparecido como mascota en acontecimientos nacionales y aparece al dorso de la moneda australiana de 20 céntimos. Es el emblema animal del estado de Nueva Gales del Sur. Hasta principios del siglo XX se lo cazaba por su piel, pero actualmente está protegido en todo su ámbito de distribución. Taxonomía y etimología[editar] Perro lobo. En 1998, el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos estimó una población aproximada de 300.000 perros lobo en los Estados Unidos (la más alta de cualquier país del mundo), mientras que otras fuentes indicaban una población quizás tan alta como 500.000[1] En los híbridos de primera generación, los lobos grises eran frecuentemente cruzados con perros parecidos a lobos (tales como Malamutes de Alaska, huskies siberianos y pastores alemanes) para obtener una apariencia más atractiva para los dueños que deseaban una mascota exótica.[3] Historia[editar] Perros lobos cazadores de mamuts de América del Norte[editar] Dos perros lobos.
Ilustración de The Menageries: Quadrupeds Described and Drawn from Living Subjects, de W. Ogilby, 1829 Las evidencias de perros lobos domesticados en América data de por lo menos 10.000 años,[4] mientras que la evidencia fósil en Europa indica que fueron empleados para la caza del mamut.[5] Ailuropoda melanoleuca. Para el 2017 se estimó que la población total superaba los dos mil ejemplares[2] de los que 1864 viven en libertad,[3] lo que demuestra que la cifra de pandas viviendo en libertad va en aumento.
Desde 1961 el panda es el símbolo de WWF (Fondo Mundial para la Naturaleza). El principal alimento del panda es el bambú (en torno al 99 % de su dieta), aunque también se alimenta de frutos, pequeños mamíferos, peces e insectos.[4] Es un buen trepador, aunque rara vez se le ve en los árboles. Se adapta a la cautividad y gracias a su pelaje soporta fácilmente las condiciones invernales de su hábitat. Anatomía[editar] Exteriormente, el panda se asemeja a un oso de coloración contrastante. Las orejas, la nariz, el pelo alrededor de los ojos, los hombros y los miembros son oscuros. Las crías pesan al nacer de 90 a 130 gramos, y apenas tienen pelo. Distribución[editar] El primer registro evolutivo del panda data de entre el final del Plioceno y el comienzo del Pleistoceno.