Root intelligence: Plants can think, feel and learn. -pasar-horas-semana-naturaleza-protege-enfermedades-201906150104_noticia. MadridActualizado:15/06/2019 01:05h Pasar al menos dos horas a la semana en la naturaleza puede ser un umbral crucial para promover la salud y el bienestar, según una investigación a gran escala liderada por la Universidad de Exeter, en Reino Unido y publicada en «Scientific Reports».
El estudio, financiada por el Instituto Nacional para la Investigación en Salud (NIHR, por sus siglas en inglés), ha comprobado que las personas que pasan al menos 120 minutos en la naturaleza por semana tienen una probabilidad significativamente mayor de reportar buena salud y mayor bienestar psicológico que aquellos que no visitan la naturaleza en absoluto durante una semana. Sin embargo, no se encontraron tales beneficios para las personas que visitaron entornos naturales como parques urbanos, bosques, parques rurales y playas por menos de 120 minutos a la semana.
Caminar vuelve al cerebro más creativo y le cura las penas. Tener como hábito realizar caminatas diarias, puede ser uno de los mejores entrenamientos también para tu cerebro, y eso está respaldado por estudios, puede aliviar las penas y revertir la depresión, entre muchos otros beneficios que aportan las caminatas de solo 30 minutos al día.
Un nuevo estudio realizado por investigadores de Stanford proporciona una explicación para esto. El pensamiento creativo mejora mientras una persona camina y se mantiene así por un tiempo. Aliviando el estrés, revirtiendo las penas y mejorando la salud cardiovascular. El estudio encontró que caminar dentro o al aire libre al mismo tiempo impulsó la inspiración creativa.
El acto de caminar en sí mismo, y no el medio ambiente, fue el factor principal. A través del tablero, los niveles de la creatividad eran constantemente y perceptiblemente más altos para ésos que caminaban comparado a los que habían permanecido sentados. ¿Por qué olvidamos el poder de las plantas? UNOS VERSOS de Fernando Pessoa sirvieron de inspiración a la fotógrafa Ouka Leele para componer su obra Nuestras hermanas las plantas, esas santas a las que nadie reza.
La obra, cargada de una nostalgia evocadora, representa una vieja escoba apoyada en un árbol rodeada de bruma y de piedras llenas de musgo. Aunque uno no sea muy religioso y nunca se le haya ocurrido rezar a una planta, es cierto que estas son las grandes olvidadas cuando se habla de ciencia. En su libro Elogio de la planta, el botánico Francis Hallé recuerda que un académico francés, analizando la obra Robinson Crusoe, describía cómo el marino camina por la isla rodeado por una catedral de verdor, se fabrica un gorro de helechos y varias horas después encuentra al primer ser viviente, un animal. Realmente todo el tiempo había estado rodeado de seres vivientes: las plantas que forman la selva. No obstante, este olvido es muy común. Los animales somos organismos heterótrofos. Científicos descubren que las plantas son capaces de "oír" En Escocia los médicos recetan viajes y naturaleza para sanar pacientes. Ahora en Escocia, los médicos pueden recetar una medicina singular y alternativa a sus pacientes: “un poco de naturaleza”.
Sí, leíste bien: los doctores en Escocia están autorizados para recetar viajes a entornos naturales, así como caminatas constantes en parques o bosques urbanos y actividades cotidianas que involucren a la naturaleza. Ahora todos los médicos del país pueden recetar el contacto con la naturaleza como parte del tratamiento de sus pacientes con enfermedades crónicas. Se trata de una medida inédita en el Reino Unido, con la cual se busca reducir algunos males que se están volviendo lamentablemente comunes.
Por ejemplo, la presión arterial alta, las enfermedades cardiovasculares y la diabetes. Dos horas en la naturaleza a la semana: clave del bienestar y la salud. Respirar aire limpio, pasear por un bosque, disfrutar del paisaje...
En general, estar en contacto con la naturaleza se asocia con frecuencia al bienestar personal y la salud pero, ¿existe una dosis mínima necesaria para detectar los efectos de esta medicina? Un equipo de investigadores de la Escuela de Medicina de la Universidad de Exeter (Reino Unido) y la Universidad de Uppsala (Suecia) parece haber dado con la receta. Yogajournal. Spending quiet time in wooded areas is viewed as good medicine in Japan, and now this practice—Shinrin-yoku, or “forest bathing”—is catching on here with scientists and park lovers alike.
Mindfully soaking up a forest’s sensory stimuli (the aroma of damp wood, the sound of crunching leaves, the feeling of plush moss) has been shown to reduce stress, anxiety, and blood pressure. In fact, sitting in the woods for as little as 15 minutes was enough to noticeably ease anxiety and raise energy, found scientists at Chiba University in Japan. And breathing in phytoncides, compounds naturally released by trees, may ramp up your immune system’s disease-fighting natural killer cells for more than a month, according to an Environmental Health and Preventive Medicine study. Practice Yoga Outside: 4 Ways Practicing Yoga Outdoors Enhances It. Research makes a strong case for taking your practice into the wild as the weather warms—or at least your backyard.
One of yoga’s (many) beauties is it can literally be done anywhere. And it turns out nature enhances your practice in an entirely different way than a studio does. A recent Swedish study found viewing nature, especially fractals (the organically occurring patterns in tree branches and fern leaves for example), increased wakeful relaxation and internal focus—two pretty important components of a rewarding yoga practice. “It makes sense to practice inside during inclement weather,” says Amos Clifford, director of the Association of Nature & Forest Therapy.
“But, when did we forget to take our practice outside on a glorious day?” See alsoGet Outside More, Boost Your Mood “Nature connects us to our roots,” says Dr. 1. “Los baños de bosque potencian el sistema inmune” ¿Pasear por el bosque nos sana?
Previene la enfermedad al disminuir notablemente la hormona del estrés que causa tantas enfermedades. Reduce la tensión arterial y el azúcar en sangre, mejora la salud cardiovascular y metabólica, la concentración, la memoria y el umbral del dolor. La medicina más eficaz que recetan los médicos en Escocia: un poco de naturaleza. Las ciudades se vuelven cada vez más una especie de fuerte encubierto por selvas de concreto.
Edificios cada vez más altos, cientos de luces cegadoras y un concierto de disonancias son las barreras modernas que impiden a muchos de nosotros entablar un diálogo activo con la naturaleza. Cada vez somos menos los que disfrutamos de los entornos naturales. Ya sea porque no se encuentran fácilmente a nuestro alcance, o simplemente porque la vida moderna ha optado por enseñarnos que no necesitamos de estos espacios orgánicos si podemos admirarlos en internet; el mundo, hoy en día, ha olvidado los valiosos aportes que nos brinda la naturaleza.
Se sabe que poco más del 54 % de la población mundial hoy vive en las ciudades (y se cree que la cifra aumentará drásticamente en los próximos años). Conociendo este dato podemos advertir que, básicamente somos más los que nos arrojamos día a día al inadvertido paisaje urbano y a sus perjuicios. Habitúate a mirar el cielo, tanto de día como de noche.