“Don’t be evil”: Google y su ejército de robots militares Google durante años había sido no sólo una de las empresas de tecnología más innovadoras, sino también una de las que gozaba de mejor aceptación entre los consumidores, percibida como uno de los mejores lugares para trabajar con una inspiración lúdica y con una preocupación por mejorar el entorno colectivo. En el sexto punto de su misión corporativa, Google señala “Haz lo correcto; no seas malo” y “hacemos dinero haciendo cosas buenas”. Lo anterior ha sido tomado por años como el lema fundamental de Google, una declaración de intenciones que, si bien siempre se sospechaba como un recurso de marketing, hoy parece caer más en el género de la ironía o hasta del humor negro. Recientemente, el gigante Mountain View adquirió la empresa fabricante de robots Boston Dynamics, la octava compañía de robótica que ha adquirido en los últimos seis meses. Douglas Rushkoff escribe para CNN sobre la aparente incongruencia de Google y su principio “Don’t be evil”:
Google X: el laboratorio secreto donde Google diseña el futuro (¿o su futuro?) Google es quizá una de las empresas más exitosas de las últimas décadas y sin duda la única que se supo imponer a sus competidores más cercanos, quedando como un cuasi monopolio digital que en años reciente ha diversificado su campo de acción, a veces con preocupantes movimientos que han hecho pensar a algunos si en un futuro próximo (ominosamente próximo) no será Google uno de los mayores facilitadores-controladores de la vida cotidiana de casi cualquier persona en el mundo. En buena medida Google ha alcanzado esta posición por medio de un innegable espíritu innovador de sus directivos y fundadores. Aplicando o no prácticas éticamente cuestionables, el gigante de Mountain View ha marcado y sin duda marcará el camino en años futuros en el consumo tecnológico y de información basado en Internet. Otras ideas tienen que ver con lo que Google llamó “la Web de las cosas” en su conferencia de mayo de desarrolladores de software: una forma de conectar objetos a Internet.
Edge.org "How else can one threaten other than with death? The interesting, the original thing would be to threaten someone with immortality." Jorge Luis Borges' response to the thugs in the Argentine Junta combines guts and fear in equal measure. He did not so much fear torture in this world as much as a life continuously reexamined and reappraised throughout the ages. We should all heed his warning as we are all rapidly becoming immortal though electronic tattooing. It used to be only royalty, presidents, mega stars, and superstar athletes who had every aspect of their daily lives followed, analyzed, scrutinized, criticized, dissected. Few understand how recently the shift to ubiquitous and permanent recording occurred. Every time we blog, charge, debit, Tweet, Facebook, Google, Amazon, YouTube, LinkIn, Meetup, Foursquare, Yelp, Wikipedia, we leave electronic nuggets, some more visible than others, of who we are, whom we are with, and what we like or are interested in.
Algocracia: la democracia será reemplazada por el (¿tiránico?) gobierno de los algoritmos Entre otras cosas, el 2013 podrá ser recordado como el año en el que descubrimos la muerte de la privacidad. Si bien muchos sospechaban que las cosas iban en esa dirección (por la fusión de los intereses del marketing y del gobierno), que nuestra información estaba siendo minada de manera masiva, como si fuera una especie de capital expropiado; con las filtraciones de Eward Snowden amanecimos a un estado de vigilancia global ciberpanóptica que no desmerece la distopía imaginada por Orwell. Hoy sabemos que entrar a Internet y navegar por los grandes sitios o utilizar gadgets y conexiones de las grandes compañías de tecnología tiene el precio de entregar nuestra información privada. No sabemos, sin embargo, bien a bien, qué se hace con esa información o qué implicaciones tiene para el panorama geopolítico y sociocultural presente y futuro. La convergencia entre los intereses de las corporaciones y el Estado puede en algunos casos ser la fórmula del fascismo.
The future computer utility > Public Interest > National Affairs The most important policy issue regarding the use of computers in the next decade will involve the creation of a “national computer public utility system.” It may seem strange to think of the computer in terms of a public utility, since ostensibly a computer is a machine that a customer buys or rents for his own use. But the recent emergence (only in the last year or two) of the possibility of “time-sharing”– whereby thousands of individual terminals, located in homes or offices, can be hooked into giant central computers through the use of telephone lines and used for information-gathering, ordering and billing services, etc.– makes the question of such a utility system anything but academic. To download a PDF of the full article, please click here.
Evgeny Morozov on Why Our Privacy Problem is a Democracy Problem in Disguise In 1967, The Public Interest, then a leading venue for highbrow policy debate, published a provocative essay by Paul Baran, one of the fathers of the data transmission method known as packet switching. Titled “The Future Computer Utility,” the essay speculated that someday a few big, centralized computers would provide “information processing … the same way one now buys electricity.” Our home computer console will be used to send and receive messages—like telegrams. We could check to see whether the local department store has the advertised sports shirt in stock in the desired color and size. It took decades for cloud computing to fulfill Baran’s vision. Highly sensitive personal and important business information will be stored in many of the contemplated systems … At present, nothing more than trust—or, at best, a lack of technical sophistication—stands in the way of a would-be eavesdropper … Today we lack the mechanisms to insure adequate safeguards. Another warning from the past.
From Galileo to Google: How Big Data Illuminates Human Culture by Maria Popova “Through our scopes, we see ourselves. Every new lens is also a new mirror.” Given my longtime fascination with the so-termed digital humanities and with data visualization, and my occasional dabbles in the intersection of the two, I’ve followed the work of data scholars Erez Aiden and Jean-Baptiste Michel with intense interest since its public beginnings. Now, they have collected and contextualized their findings in the compelling Uncharted: Big Data as a Lens on Human Culture (public library) — a stimulating record of their seven-year quest to quantify cultural change through the dual lens of history and digital data by analyzing the contents of the 30,000 books digitized by Google, using Google’s Ngram viewer tool to explore how the usage frequency of specific words changes over time and what that might reveal about corresponding shifts in our cultural values and beliefs about economics, politics, health, science, the arts, and more. What makes a problem fascinating?
Predicciones de Isaac Asimov para el año 2014 (escritas en 1964) Isaac Asimov es uno de los titanes indiscutibles de la ciencia ficción literaria, pero al igual que colegas suyos como Ray Bradbury o Arthur C. Clarke, fue también un privilegiado observador crítico de su momento histórico. En 1964, con ocasión de la Feria Mundial de General Motors en Nueva York, Asimov escribió una pieza para The New York Times titulada ”Visita a la Feria Mundial del 2014“, en la que describe algunos avances científicos, tecnológicos y sociales que sin duda podemos reconocer hoy en día, al igual que otros (probablemente la mayoría) que aún quedan lejos de nuestro alcance. Explosión demográfica Con una población de 7 mil millones de personas en 2011, la idea de ciudad y de comunidad ha cambiado desde los días de Asimov. Aunque el escritor previera que la zona entre Boston y Washington se convertiría en la más poblada del planeta (“con una población de más de 40 millones”), es cierto que las megalópolis son una realidad de hoy en día. Alimentación Tecnología y equidad Salud
Google patents robot help for social media burnout 22 November 2013Last updated at 07:08 ET Robots may soon be pretending to be you on social media networks If maintaining your presence on social media is becoming a burden, Google may be able to help. The search giant has patented plans for software which slowly learns how you react on social networks. The software can mimic your usual responses to updates and messages from friends and relations to help cope with the daily data deluge. The software also analyses continuing interaction and flags messages that demand a more personal response. Life lessons "The popularity and use of social networks and other types of electronic communication has grown dramatically in recent years," wrote Google software engineer Ashish Bhatia in the patent. In a bid to help people cope Mr Bhatia envisions a sophisticated system that collects information about all the different social networks someone has joined. Keeping up with social networks can involve lots of juggling
Breve teoría del autorretrato en la era del “selfie” Hace unos días, Darth Vader publicó su primera selfie en Instagram. Este hecho, en apariencia sólo publicitario (la imagen inaugura la cuenta oficial de Star Wars en dicha red), nos hace pensar que las redes sociales nos están haciendo revisitar el pasado y reconfigurarlo de alguna forma: una foto de Paul McCartney de sí mismo ya no es un autorretrato, sino una selfie. Incluso la palabra selfie tiene implicaciones peculiares: se trata de la contracción de self-portrait, el retrato de sí mismo que los artistas han hecho durante siglos. El autorretrato era no sólo un género en pintura, sino una visión de cómo el artista se veía a sí mismo a través del filtro de su arte. No entraremos a discutir el aura benjamineana perdida o recuperada a través de las selfies (daría para un par de tesis doctorales); en cambio, sería buen momento para reflexionar acerca de un par de elementos que hacen de la selfie una expresión propia de nuestros días en el ecosistema web. -Así es como me veo a mí mism@.