Neuroeducación: estrategias basadas en el funcionamiento del cerebro. La información que tenemos sobre el cerebro humano, órgano responsable del aprendizaje, se ha visto claramente incrementada debido al desarrollo de las nuevas técnicas de visualización cerebral.
5 claves que mejorarán la calidad de tus decisiones en pista. Dicen los estudios que nuestra mente produce unos 66.000 pensamientos al día.
Y buena parte de todos ellos están destinados a tomar decisiones. La realidad es que nos pasamos el día tomando decisiones. (Al fin y al cabo esta es la gran tarea de nuestro cerebro, tomar buenas decisiones que le permitan mantenerse estable y sobrevivir). Tomamos todo tipo de decisiones a lo largo del día, desde las decisiones más simples hasta las más complejas, desde decisiones elegidas de manera consciente a decisiones adoptadas de manera inconsciente, desde decisiones más importantes a decisiones menos importantes. En la pista pasa exactamente lo mismo. Cuando un jugador se enfada tras un fallo está decidiendo. La neurociencia demuestra que el elemento esencial en el aprendizaje es la em... El investigador en neurociencia Francisco Mora asegura que el elemento esencial en el proceso de aprendizaje es la emoción porque sólo se puede aprender aquello que se ama, aquello que le dice algo nuevo a la persona, que significa algo, que sobresale del entorno en Neuroeducación, el libro que acaba de publicar en Alianza Editorial.
“Sin emoción –dice– no hay curiosidad, no hay atención, no hay aprendizaje, no hay memoria”. Francisco Mora (Granada, 1945), doctor en Neurociencia por la Universidad de Oxford y catedrático de Fisiología de la Universidad Complutense, ha publicado Neuroeducación (Alianza), un volumen con el que pretende desarrollar “las preguntas centrales que son de interés y preocupación en el mundo de la enseñanza a cualquier nivel y ayudar a desentrañar las claves de cómo contestarlas a la luz de los conocimientos mas recientes de la neurociencia cognitiva”.
¿En qué espejos se miran nuestros alumnos? En el año 1996, un grupo de investigadores italianos dirigidos por el profesor Rizzolatti, estaban realizando un estudio en el que registraban la actividad eléctrica cerebral en simios mientras agarraban diferentes objetos.
En un momento dado, hubo algo que les desconcertó, descubrieron que ciertos grupos de neuronas se activaban sin que el mono realizase ningún tipo de movimiento. Tras varias comprobaciones se dieron cuenta que existían una serie de neuronas que se activaban igual cuando el mono agarraba un objeto, que cuando veía a otro mono agarrar el objeto. Acababan de descubrir las neuronas espejo. Posteriormente, se ha demostrado que este tipo de neuronas también están presentes en el cerebro humano, y que del mismo modo, se activan cuando realizamos una determinada acción, pero también cuando vemos a otra persona realizando una acción similar. Neurociencia: ¿Qué le hace la música a nuestro cerebro? Los seres humanos convivimos con la música en todo momento.
Es un arte que nos hace disfrutar de tiempos placenteros, nos estimula a recordar hechos del pasado, nos hace compartir emociones en canciones grupales, conciertos o tribunas deportivas. Pero eso que resulta por demás natural, se produce a través de complejos y sorprendentes mecanismos neuronales. Arquitectura del aula Neurodidáctica. Uno de los grandes descubrimientos de la neurociencia en los últimos años ha sido demostrar la incidencia directa de las emociones en el aprendizaje.
Las claves en Neuroeducación. En los últimos años se ha producido un enorme desarrollo en las tecnologías de visualización cerebral que ha posibilitado el análisis del cerebro humano realizando tareas cognitivas similares a las que se dan en el aula.
Asumiendo un enfoque interdisciplinar en el que confluyen estos conocimientos suministrados por la neurociencia, junto a lo conocido en psicología cognitiva o pedagogía, surge esta nueva disciplina llamada neuroeducación que tiene como objetivo mejorar los procesos de enseñanza y aprendizaje. En el siguiente artículo realizamos un breve recorrido sobre algunas cuestiones estudiadas por la neurociencia que tienen implicaciones pedagógicas importantes. Porque conocer cómo funciona nuestro cerebro constituye el nuevo paradigma educativo que va a revolucionar la escuela del S. XXI. El lóbulo frontal: el director ejecutivo del cerebro. Introducción El lóbulo frontal es uno de los cuatro lóbulos de la corteza cerebral y constituye una región grande que está situada en la parte delantera del cerebro, justo detrás de la frente (ver figura 1). Es el responsable de procesos cognitivos complejos, las llamadas funciones ejecutivas. Estas funciones son operaciones mentales dirigidas hacia un fin que permiten el control conductual, es decir, posibilitan que podamos elegir, planificar y tomar decisiones voluntarias y conscientes.
Según Elkhonon Goldberg, el lóbulo frontal es al cerebro lo que un director a una orquesta: coordina y dirige las otras estructuras neurales del cerebro en una acción concertada1. Fig 1. (rojo), temporal (azul), parietal (verde) y occipital (amarillo)2. La memoria de trabajo, el lenguaje, el movimiento o la autoconciencia dependen del lóbulo frontal, así como la originalidad y la creatividad (para innovar hace falta conocer, lo que indica la importancia de la memoria de trabajo). Fig 2. Autocontrol 4 A. Neuroeducación: estrategias basadas en el funcionamiento del cerebro.
La información que tenemos sobre el cerebro humano, órgano responsable del aprendizaje, se ha visto claramente incrementada debido al desarrollo de las nuevas técnicas de visualización cerebral. Neuronas espejo en el aula. Estamos en un punto en el que los resultados de la neurociencia pueden ejercer una influencia significativa en la sociedad y en nuestra comprensión de nosotros mismos, y cambiarlas.
Marco Iacoboni Cuenta V. S. Ramachandran la historia de un paciente suyo que había perdido la mano en la primera guerra del Golfo. Como pasaba en situaciones semejantes, al tocarle la cara era capaz de sentir la mano fantasma. Las neuronas espejo fueron descubiertas en 1991 por el grupo de investigación dirigido por Giacomo Rizzolatti al estudiar el cerebro de monos macacos.
Las neuronas espejo constituyen el sustrato cerebral de la tendencia automática a imitar que nos caracteriza a los seres humanos, permitiendo a nuestro cerebro correlacionar acciones propias con ajenas y dotarlas de un significado (las regiones motoras de la corteza cerebral no se dedican sólo a tareas ejecutivas como se creía antes, “el cerebro que actúa es un cerebro que comprende”, como afirma Rizzolatti). Imitación 1. 2. Empatía 1. 2. Neuronas espejo, empatía, imitación y desarrollo en la primera infancia. Los niños necesitan más modelos que críticas Joseph Joubert La imitación es una capacidad innata.
Los bebés de apenas unos días de vida son capaces de imitar movimientos faciales como abrir la boca o sacar la lengua (conductas que están en el repertorio del recién nacido), lo cual indica que la capacidad para usar equivalencias intermodales está presente desde el nacimiento (Meltzoff y Moore, 1977). Actividad predictiva del cerebro de los bebés En el primer año de vida, los bebés utilizan áreas de su cerebro que participan en sus propias habilidades motrices con el objetivo de percibir las acciones de otras personas (Southgate et al., 2009). En el estudio citado, Southgate y sus colaboradores registraron la actividad cerebral de 15 niños de 9 meses de edad mediante electroencefalogramas (EEG).